La evolución: de Carolina Herrera a CH
Ya Carolina Herrera, el perfume para ellas con el que se inició oficialmente la carrera de Herrera, destacó por un intenso aroma dulce. Entre sus notas de salida se percibe fuertemente la flor de azahar y entre las notas de corazón destaca el jazmín. Es clasificada por muchos como completamente atemporal y sigue siendo una fuerte apuesta para mujeres a partir de los 30.La edad del público de las fragancias de Carolina Herrera también ha disminuido poco a poco. Mientras que Carolina Herrera hoy se considera más bien para mujeres adultas a partir de los 30, la famosa CH y toda su línea son ideales para mujeres jóvenes. Igual que las líneas 212 y 212 VIP, que incluso se pueden clasificar como sexy y atrevidas. Una de las más recientes creaciones, la edición especial y limitada Central Park de la línea CH, también cuenta con un carácter más juvenil, con notas afrutadas y amaderadas. En la evolución hacia un público más joven el cambio de toques florales a más frutales con notas hasta cítricas ha jugado un importante papel.
A la vez que las fragancias, también los diseños de las botellas han vivido una evolución de clásico a más moderno y atrevido. Como prueba, sólo nos hace falta ver los diseños de Carolina Herrera y la ya muy conocida 212 VIP.
Las fragancias para hombres
También la versión masculina de Central Park destaca por su esencia frutal. Y no es la única. De hecho, gran parte de los perfumes para hombres de Carolina Herrera tienen un punto dulce, como la conocida CH Men, con notas de corazón amaderadas y de jazmín, sobre la cual algunas narices opinan que se podría usar incluso como perfume de mujer.Y siguen la tendencia de muchos otros diseñadores que intentan darle un toque más suave y sensual a sus aromas para ellos, distanciándose de fragancias masculinas clásicas duras y agresivas de notas verdes. De esta forma, dejamos que ellos evolucionen hacia la figura de un hombre sensual y seductor, más acorde con una identidad joven que no el toque de hombre protector y duro.