Yes I Am, la sensualidad atrevida de Cacharel


perfumes para mujer cacharelEl reflejo de lo femenino, de la mujer, del poder de la misma y la seguridad es algo a a los fabricantes de perfume les interesa reflejar en sus perfumes. Buscábamos un perfume arrebatador, casi adictivo para muchas e indispensable para otras. Buscábamos un aroma que tuviera “punch” tanto para el rango juvenil como para las mujeres más adultas, que tuviera mucha energía. Y, para no desvariar, el frasco tenía que transmitir exactamente lo mismo.


La sensualidad atrevida y destacable

Yes I Am de Cacharel es, como hemos dicho antes, el reflejo más femenino y sensual. Un pequeño frasco que incluye en su interior un icono de la perfumería para mujer, lleno de magnetismo, con mucho de lo que hablar y muchos sueños que cumplir. Chic, estiloso y con mucho glamour.

Se hizo pensando en las mujeres que lo dan todo, que son libres, que no buscan el hombro de nadie, pues pueden apoyarse en sí mismas, vivir intensamente.

Su familia olfativa es la Oriental Floral, creada por maestros como Honorine Blanc. Sus notas afrutadas y cítricas crean un bonito desfile entre las frambuesas, la bergamota y los limones. Dicho desfile, lleno de luz, lo complementa un corazón radiante e intensamente aflorado, sensualidad y feminidad. Las notas que componen esta fase pueden ser el jengibre, la gardenia, el jazmín, la flor de azahar.

Para quienes no hayan probado este perfume a tiempo, pensaréis que es algo que llevabais buscando desde que teníais 20 años. Un perfume que no fuera ni demasiado joven ni demasiado asentado. Atrevido, elegante, sutil, rebelde, tímido, todo al mismo tiempo. Se te queda grabado en la memoria casi sin querer.

¿Qué me dices del frasco?

El frasco para perfume es un enorme pintalabios con un relieve acolchado que le da estilo y elegancia a todo el conjunto de la fragancia. Su cuello dorado y su barra de labios en un fuerte e intenso rojo le da el toque sensual y atrevido.  El labial es como un icono de representación de la mujer, por lo que el juego está organizado al a perfección.

Es muy llamativo a simple vista. Por lo que es imposible no pararnos delante de él y no cogerlo y echarnos en la muñeca para probarlo, sentirlo, disfrutarlo.

¿Lo probarías?

Si todavía no has entrado en el mundo de Cacharel y has descubierto esta edición… podría ser un buen comienzo, algo intenso, pero un buen comienzo.