Llevamos ya bastante tiempo (por no decir años) hablando de la importancia que tiene elegir siempre productos de cosmética ecológica para cuidar nuestra piel y lo importante que es para cuidar también del medio ambiente. Pero, me he dado cuenta que estamos hablando solamente de una pequeñísima parte de un estilo de vida basado en la ecología, y que, hay muchísima información muy interesante que seguramente desconocemos y que nos estamos perdiendo por centrarnos solamente en el mundo de la cosmética. Por eso, hoy vamos a abrir nuestras fronteras y nos vamos a sumergir en por qué los estilos de vida ecológicos son tan importantes.
¿Por qué seguir un estilo de vida ecológica?
Cada día más y más personas se suman a la ecología, pero, exactamente ¿de qué se trata?
Un estilo de vida basado en la ecología podría resumirse es llevar un estilo de vida más natural centrándonos en la sostenibilidad, el cuidado y respeto al medio ambiente y a las diferentes formas de vida que existen.
Cuando hablamos de sostenibilidad y cuidado del medio ambiente y otras formas de vida, los términos van de la mano, ya que si realizamos nuestras actividades diarias de forma que generen un menor impacto contra el medioambiente estaremos cuidando el propio medio ambiente y las formas de vida que habitan en el.
¿Qué beneficios vamos a conseguir al llevar una vida ecológica?
- Protegemos la biodiversidad: Al reducir la contaminación gracias a nuestras acciones sostenibles y al no sobreexplotar nuestros recursos, garantizamos el mantenimiento de los hábitats naturales
- Potencia tu salud: Seguir un estilo de vida ecológico en el que elijamos cosmética natural, cosmética ecológica y sigamos una alimentación sana, equilibrada y ecológica va a conseguir que nuestro cuerpo se encuentre mejor que nunca. Hay que recordar que los productos de cosmética convencionales utilizan químicos que dañan nuestra piel, y que los productos alimenticios de hoy en día cuentan con una gran cantidad de azúcares innecesarios.
Consejos para seguir un estilo de vida ecológica
- Aprovecha la luz natural y evita un gasto innecesario de luz. ¡Tu bolsillo también lo agradecerá!
- Evita utilizar servilletas de papel, es un gasto innecesario de un solo uso. Opta por productos que puedan reutilizarse, como un paño.
- Compra las frutas, verduras y frutos secos a granel, así evitarás la utilización de envases de plástico y además potenciarás el pequeño comercio.
- Si cuentas con espacio y ganas suficiente, crea tu propio huerto y planta tus hortalizas favoritas, así tendrás verduras o frutas frescas sin químicos.
- Reutiliza los objetos de tu casa, y cuando adquieras muebles nuevos asegúrate de que cuentan con la certificación FSC.
- No tires medicamentos caducados o que ya no utilizas a la basura. Acude a tu farmacia más cercana y recíclalos allí.
- Elije en la medida de lo posible productos de Comercio Justo, productos procedentes de agricultura ecológica, de temporada o locales. De esta forma se consigue reducir el número de transporte, y con ellos la cantidad de combustible utilizada.
- Respeta el medio ambiente en tus escapadas a la playa o montaña. Recuerda recoger todos los residuos que habéis producido.
- Utiliza productos de cosmética ecológica, ya que están formulados con ingredientes naturales dejando a un lado los productos químicos, por lo que cuidas el medio ambiente y tu piel.
A nivel personal, desde que descubrí el mundo de la ecología, he ido intentado incorporar estos hábitos poco a poco en mi vida, y te animo a que tú también lo hagas. Por ti y por el mundo.
Para ayudarte un poco, ya sabes que siempre recomiendo la web de Vismar Natural, una web de cosmética natural en la que ahora, además, han incluido una sección de alimentación ecológica.